Alerta en la obra: la falta de peones encarece los costes

El precio del proceso de producción de las viviendas sube hasta un 15%

07/02/2018

La recuperación del sector inmobiliario es ya un hecho y nadie duda del buen momento que vive el mercado, pero ¿nos hemos parado a pensar si tenemos recursos suficientes para hacer todas esas miles de viviendas que las grandes promotoras han planificado en sus estrategias de negocio?

«Cuando hablamos de recursos hablamos de capital, tecnología y de mano de obra. En este caso, hay capital por los fondos de inversión, aunque limitado a un circuito de promotoras solventes; también hay tecnología, aunque faltan algunas aplicaciones prácticas que cubran el proceso constructivo, pero lo que ya no hay son subcontratas suficientes para construir y está empezando un nuevo fenómeno en las empresas de hacer acopio del factor humano, por la falta de mano de obra cualificada», declara Iván Rodríguez, consejero delegado de iKasa.

La crisis se llevó por delante toda la masa productiva y en estos años apenas se ha formado a nadie. «La producción bajó un 95%, que eso es prácticamente la desaparición del sector. Las transacciones inmobiliarias cayeron un 50% y los precios un 40%, pero el tejido productivo casi despareció al completo y es un problema al que nos enfrentamos ahora y que necesita una solución rápida porque la realidad es que tenemos que crecer en producción», explica Carolina Roca, vicepresidenta de Asprima.

La directiva destaca que «en 2017 se han dado 470.000 transacciones y solo un 10% ha sido de obra nueva. Este dato no significa que la demanda prefiera viviendas de segunda mano antes que obra nueva, lo que significa es que la demanda absorbe la obra nueva existente y el resto se tiene que ir a la segunda mano».

Según los expertos del sector, en 2017 se ha hecho poca vivienda. Nos hemos acercado a las 80.000 viviendas iniciadas y 57.000 unidades terminadas en todo el territorio nacional, datos que son muy bajos estando en un escenario de claro crecimiento. La Asociación Inmobiliaria de Promotores de Madrid (Asprima) estima que deben iniciarse 150.000 viviendas anuales, que es casi el doble de lo que se está haciendo. Esto supone duplicar también la capacidad productiva.

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